La Teosofía y la Teúrgia
en el Siglo XVI y en el Siglo XXI
Carlos Cardoso Aveline
Henry (Heinrich) Cornelius Agrippa
Uno de los grandes místicos de la tradición esotérica occidental, el escritor alemán Heinrich C. Agrippa nació el 14 de septiembre de 1486, el mismo día en que la reciente Logia Independiente de Teósofos fue creada en 2016.
Contemporáneo de Paracelso [1], influenciado por los escritos de John Reuchlin [2], Agrippa tuvo una vida externamente cambiante en todo momento, porque una energía probatoria intensa rodea la existencia terrestre de gran parte de los discípulos, de los místicos verdaderos y de los aspirantes reales al discipulado.
Miembro de la pequeña nobleza, se casó en 1514. Enseñó en universidades y fue protegido por gente importante. Soldado valiente, creó una sociedad mística secreta. Al actuar en defensa de una mujer falsamente acusada de brujería, Agrippa fue perseguido por las autoridades eclesiásticas. Su primera esposa murió pocos años después de casarse. Conoció el desempleo. Acusado de tener deudas, fue encarcelado en 1531. Murió en 1535 y dejó siete hijos, habiéndose casado tres veces. [3]
Su obra escrita permanece viva. Agrippa es un ejemplo de ocultista lúcido. Lo que escribió sobre las correspondencias entre el cielo y la tierra es de gran valor. Agrippa es citado como un sabio en “La Doctrina Secreta”, de Helena Blavatsky, y en las Cartas de los Mahatmas.
Es una circunstancia numerológica interesante el hecho de que, habiendo nacido el día en que sería fundada en 2016 la Logia Independiente, Agrippa murió el 18 de febrero de 1535, precisamente el día y el mes en que, siglos después, sería creada la Logia Unida de Teósofos en los Estados Unidos, en 1909. Y hasta hoy día siguen existiendo algunos sectores de la Logia Unida que son leales a la propuesta original de Robert Crosbie y John Garrigues, y que no cedieron a la pseudoteosofía.
Agrippa escribió:
“Los magos enseñan que, cuando los [factores] inferiores están en armonía con los superiores, los dones celestiales pueden ser traídos hacia abajo a través de las influencias oportunas del cielo, y así también, a través de estos dones celestiales, los ángeles celestes (que son servidores de las estrellas) pueden ser encontrados y traídos hacia nosotros. Jámblico, Proclo y Sinesio, con toda la escuela de los platónicos, confirman que no solo los dones celestiales y vitales, sino también ciertos dones intelectuales, angelicales y divinos pueden ser recibidos desde lo alto gracias al hecho de que algunas sustancias materiales tienen un poder natural divino, es decir, poseen una correspondencia con los [niveles] superiores, pudiendo ser correctamente recibidos y oportunamente reunidos de acuerdo con las reglas de la filosofía natural y de la astronomía”. [4]
Y, pocas líneas más abajo, añadió:
“Así como las cosas visibles son producidas por causas ocultas, así también un mago usa cosas visibles para atraer cosas ocultas, esto es, a través de los rayos de las estrellas, de vapores, luces, sonidos y cosas naturales que son agradables para aquellos [niveles] celestiales, y en las cuales, además de sus cualidades corpóreas, hay también una especie de razón, de sentido, de armonía, y medidas y órdenes divinos e incorpóreos”. [5]
De hecho, es notoriamente enorme el área común entre la teosofía clásica y la teúrgia, o sea, entre la filosofía esotérica y la práctica de la presencia divina.
La teosofía no es un invento de corto plazo. Cinco siglos después, es un honor para la pequeña Logia Independiente de Teósofos cumplir años el mismo día que Heinrich Cornelius Agrippa von Nettesheim, el brillante pionero alemán de la filosofía esotérica moderna.
NOTAS:
[1] Sobre Paracelso, véase “Paracelso e o Livro da Natureza” y “A Rosa de Paracelso”, en portugués. En inglés, examínense los escritos de Paracelso, en dos volúmenes: volumen uno, y volumen dos.
[2] Véase el artículo “Reuchlin, o Pai da Reforma”.
[3] Véase “Encyclopaedia Britannica”, edición de 1967, volumen 1, p. 405, y el libro “Three Books of Occult Philosophy or Magic”, Henry Cornelius Agrippa, Kessinger Publishing Company, pp. 15 a 24.
[4] La astronomía y la astrología eran inseparables cuando Agrippa escribió, porque la ciencia aún no había caído en la ceguera materialista.
[5] “Three Books of Occult Philosophy or Magic”, Henry Cornelius Agrippa, Kessinger Publishing Company, Montana, USA, 288 pp., capítulo XXXVIII, p. 121.
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El artículo “Septiembre, Agrippa y las Lecciones del Cielo” es una traducción del portugués y ha sido hecha por Alex Rambla Beltrán, con apoyo de nuestro equipo editorial, del cual forma parte el autor. Texto original: “Setembro, Agrippa e as Lições do Céu”. La publicación en español ocurrió el 16 de septiembre de 2020.
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