Los Sentimientos Básicos
de los Pueblos y de los Países
Carlos Cardoso Aveline
A la derecha, Homer Firestone (1921-1996) con su esposa Elvira
Pocos han escrito sobre la interacción entre el “ethos” de una nación – su sentido de identidad como pueblo – y la actitud emocional dominante en sus ciudadanos.
En su libro “The Andean Soul”, Homer L. Firestone discute la dimensión sociológica de los sentimientos y hábitos emocionales. [1]
Leer el abordaje de Firestone acerca de este asunto lleva a deducir que la educación moral de los individuos – un desafío del que Helena Blavatsky estaba muy consciente – es en gran parte un sinónimo de educación emocional. [2] Porque la emoción es kármica en sus patrones, y los sentimientos básicos determinan en gran parte el pensamiento.
No es posible comprar en un supermercado el amor por la verdad, el sentido de justicia y el discernimiento correcto. La base y el fundamento de estos tres factores están en el mundo emocional de cada uno, en su carácter, y en la base emocional de las familias y de los pueblos.
Hablar y razonar, por sí mismos, no llevan a nadie hacia la verdad. Durante siglos, la sociedad occidental se ha distanciado excesivamente de las emociones. El resultado es un cultivo enfermizo de emociones inferiores y egoístas bajo la apariencia de “pura racionalidad”, y a menudo con una actitud pseudocientífica.
Una práctica ciega o dogmática del cristianismo es parte del problema, porque separa al sentimiento del raciocinio. La mística cristiana profunda, sin embargo, permite llegar a la verdad y a la teosofía universal.
Tenemos algo que aprender de las sociedades que, como las naciones andinas, son testimonio de épocas anteriores de nuestro planeta. Porque ellas nos ayudan a integrar mejor la razón con la emoción. No hay razón verdadera a menos que ella tenga una relación sana con el mundo de las emociones y con el ambiente natural.
Esta lección es simple en apariencia, pero la sociedad materialista no logra entenderla. Pese a los obstáculos, la integridad emocional tiene que ser alcanzada, así como la sincera comunión entre sentimientos, pensamientos y el mundo natural. La lección es indispensable y tiene que ser aprendida, o reaprendida, tarde o temprano y de un modo o de otro.
NOTAS:
[1] “The Andean Soul”, de Homer L. Firestone, PhD, un libro raro y difícil de encontrar, publicado independientemente en Bolivia, copyright 1984, 103 pp. Véase la introducción.
[2] Sobre la perspectiva de Blavatsky en relación con la necesidad de educación moral, véase, en inglés, el artículo de ella “Moral Education, by Prof. Buchanan”.
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El artículo “Aspectos Culturales y Espirituales de la Emoción” fue publicado como ítem separado en los sitios web de la Logia Independiente de Teósofos el 9 de septiembre de 2024. Una versión inicial del texto forma parte de la edición de diciembre de 2021 de “El Teósofo Acuariano”, pp. 18-19.
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