La Consciencia No Pensada Define el Futuro
Carlos Cardoso Aveline
El estudiante de filosofía clásica está expuesto continuamente a corrientes de pensamiento falso y otras formas de vibración inferior. Ellas llegan a él con invitaciones disfrazadas para que adopte impulsos basados en el apego, la codicia, el miedo, la rabia, etcétera.
En ausencia de una vigilancia adecuada, el peregrino adopta como si fuesen suyas varias ideas y emociones desastrosas que vienen tanto de amigos como de enemigos, o de los grandes círculos de atmósfera mental y karma colectivo.
Si no quiere ser llevado por las mareas variadas de la ignorancia, el ciudadano necesita identificarse con la esencia de la generosidad impersonal presente en su corazón. En otras palabras, el estudiante bien informado despierta en sí mismo el centro de amistad silenciosa hacia todos. Al mismo tiempo, percibe y rechaza las formas subconscientes de autoidentificación con el mundo de las apariencias, y con cualquier cosa moralmente despreciable o intelectualmente estrecha.
La identificación con lo falso puede ocurrir a través del placer o a través del dolor. Tanto el sufrimiento como la satisfacción esclavizan a los desatentos.
La vigilancia es necesaria en todo momento. La ingenuidad irresponsable causa grandes perjuicios. La percepción autoconsciente – la actividad mental voluntaria – no es suficiente para comprender o dar un rumbo correcto a la vida. La acción mental voluntaria es una parte menor de la existencia del alma. En su libro “Raja Yoga”, el yogui Ramacharaka aventura un número simbólico al afirmar que el “90 por ciento” de nuestra consciencia está fuera del campo autoconsciente.
El buscador de la sabiduría amplía poco a poco tanto su percepción pensada como su percepción no pensada de las dinámicas subconscientes de la vida, que incluyen factores como los miedos, los deseos y todo tipo de sentimientos y hábitos ciegos.
Él aprende a interactuar directamente con las realidades supraconscientes, es decir, los niveles superiores y benditos de la consciencia, que no dependen de la actividad pensamental y fluyen por encima del nivel en el que las palabras pueden ser dichas o escuchadas.
Las enseñanzas verbales de la teosofía clásica son éticos. Se basan en la filosofía que afirma la bondad fundamental del universo y del alma. Sin embargo, el punto de vista enseñado por la filosofía de la bondad es duramente puesto a prueba por la ignorancia individual y colectiva. Es atacado por fuerzas subconscientes, no solo irracionales sino antirracionales, que con astucia imitan a la bondad para herir mejor.
Ser bondadoso, por tanto, no es lo mismo que parecer bondadoso.
La filosofía de la ética altruista debe ser defendida cuando fuere necesario sin la intermediación del pensamiento. Hay un nivel de su preservación que acontece como una batalla directa, un duelo en el cual el ataque y la defensa son demasiado rápidos para esperar al proceso de raciocinio. La defensa incluye el plano del pensamiento, pero no está sujeta a él. La defensa de la justicia es más fuerte que el terreno de las ideas, porque se desarrolla en los varios niveles de consciencia.
El peregrino que estudia teosofía original es un guerrero. En el judo, la esgrima y la lucha por la ética, el duelo contra la ignorancia es con frecuencia más rápido que la palabra hablada y acontece como un relámpago en la dimensión de las premisas, de las simientes, de la sugestión y de las bases.
La consciencia que no se expresa por el pensamiento define una parte decisiva del carácter y del destino.
Para hacer frente a los desafíos no pensados que enfrentará, el peregrino alimenta de modo correcto, a lo largo del tiempo, los sectores silenciosos de su ser. Así fortalece constantemente la esfera de la autoconsciencia y la autorresponsabilidad en su vida, y hace que la fuerza gravitacional de sus buenos pensamientos influencie de modo trascendente cualquier atmósfera kármica de la que él participe.
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El artículo “El Subconsciente y el Supraconsciente” es una traducción del portugués y la tarea ha sido hecha por Alex Rambla Beltrán, con apoyo de nuestro equipo editorial, del cual forma parte el autor. Texto original: “O Subconsciente e o Supraconsciente”. La publicación en español ocurrió el 30 de julio de 2022.
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